Podemos estar viviendo años de gloria ciclistica con batalla y podio asegurado en cuanta gran vuelta ciclistica haya, pero nunca la gloria de Nairo, Uran y Gaviria trascendera en el alma de los Colombianos que nos acercamos a la quinta decada de vida como la del gran Luis Alberto Herrera.
Hoy me lo encontre en una esquina de la villa olimpica de Palmira en medio de la gran carrera Oro y paz 2.1 y no podia ser otro "Lucho" que el de siempre. Callado, solitario, mirando desde su retiro la multitud que perseguia a Uran y a Sergio Henao.
Lucho Herrera fue y sera el gran heroe nacional, su imagen victoriosa en Alpe D´Huez 1984, la imagen de su cara ensagrentada bajando a Saint Etienne en el 85 y esa magistral etapa en Lagos de Covadonga no podran ser borradas jamas de la historia deportiva nacional.
Gracias, Lucho. Siempre seras el gran campeon.
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